Como si ya fuera el presidente en funciones, AMLO, el presidente electo, parece que sigue en campaña, haciendo promesas desmedidas en un lugar, que luego serán desmentidas en otro. ¿Acaso esa será su forma de gobernar?
El caso más reciente y concreto es el controvertido tema de la presa El Zapotillo desplantada en una cuenca de los Altos de Jalisco que, aún, está sin llegar a la altura buscada y sin empezar a recoger la mucha agua que necesitará, y que también, aún, está sin definir, si sus legítimos dueños, los pueblos alteños, tendrán derecho, primero, a ella, o terminará siendo más de León y de Guadalajara.
Y digo esto porque el presidente electo, en Jalisco, reconoció el primer derecho que tiene Jalisco y los Alteños junto con Guadalajara. Y ahora, en días pasados, que visitó a León, les dijo que se hará todo para trasvasarla para que no le falte el agua a León.
Ahora bien, me pregunto: ¿desaguarán a los Altos de Jalisco para vender el agua a León?, ¿seremos los burros cargados de agua y muertos de sed?, ¿quién es el dueño original del agua?, ¿acaso no dijo Jesús que Dios hace llover el agua para todos? Dejemos, pues, que el agua llegue a todos por sus cauces naturales…
León tiene su cuenca del Lerma. No inventemos más ríos de los que ya hay; no queramos corregir a la naturaleza en sus leyes de distribución. Apliquemos el sabio principio popular: AGUA QUE NO HAS DE BEBER… DÉJALA CORRER.
¿Acaso los pueblos Alteños solo tendremos el derecho a buscar fuera el agua y a bañarnos con las aguas negras y el lodo?
El agua es vida… No dejemos que muera.
El agua está viva, dejémosla que corra.
Contexto:
En el comunicado 34 de la página lopezobrador.org.mx después de su visita al estado de Guanajuato, con fecha del primero de octubre, destacan las siguientes citas textuales:
“Es polémico pero lo tengo que decir, ya saben que mi pecho no es bodega y siempre digo lo que pienso. Vamos a resolver el problema de la presa de El Zapotillo para que haya agua para León. No se van a violar los derechos humanos, no van a desaparecer los pueblos. Vamos a ser respetuosos de la altura de la cortina y vamos a tener un acuerdo con el gobierno de Jalisco.”
“También quiero llamar la atención sobre algo. Se ha invertido muchísimo dinero en esa obra inconclusa. Sería fácil para mí decir: ‘Ahí que se quede, total, yo no hice el compromiso’. Si actuara de esa manera sería muy irresponsable porque ahí hay inversión; es dinero del presupuesto que es dinero de todo el pueblo. Ninguna obra inconclusa va a terminar en el abandono, tenemos que terminar toda la obra que está en proceso, aunque la hayan hecho otros gobiernos”.
