“Quédate con nosotros pues el día ya declina, y entró a quedarse con ellos “(S. Lc. 24,29)
En la gran Alegría de celebrar a Cristo Resucitado, les deseo un tiempo de Pascua lleno de bendiciones.
Habiendo vivido la Semana Santa como tiempo especial de nuestra vida; Semana que culmina la Cuaresma y abre las puertas del Cielo, entramos de lleno a la vivencia de la Pascua.
La Pascua es la celebración jubilosa del Triunfo del Señor Jesucristo sobre la muerte y el mal. Es entonces también Nuestra Pascua; es decir nuestro vigor en su Gracia y Amistad y nuestro tener, por su misericordia, nuestra Pascua Eterna.
Por este medio quiero felicitarles por ser portadores de esta bendición de vida eterna que Dios nos regala. Felicidades a todos los que han renovado su vida y que quieren vivir algo nuevo en Cristo y María Santísima. Felicidades a todos los que en las comunidades parroquiales han realizado las actividades de la Cuaresma, Semana Santa y ahora la Pascua, a los que han ido a misiones fuera de la Diócesis de San Juan. Felicidades por su testimonio que edifica el Reino de Cristo.
He querido poner de base el texto de San Lucas donde los discípulos son alcanzados por Jesucristo Resucitado. “Quédate con nosotros pues el día ya declina, y entró a quedarse con ellos “(S. Lc. 24,29)
Ellos le piden quedarse, pues el día termina, y Jesucristo accede a entrar con ellos. ¡Qué gran oportunidad para ver que Jesucristo realmente nos acompaña, y quiere bendecirnos con su compañía, palabras y entrar a nuestra vida!
Hoy ante tantas situaciones de dudas en la fe, de falta de sentido a la vida y tantas tristezas que vivimos; somos llamados por Jesucristo a reconocerlo entre nosotros, invitémoslo a entrar a nuestra voluntad, a fortalecer nuestra fe, a entrar a nuestra familia y ciudad. Ante tantas situaciones causadas por la violencia, el crimen, indiferencias; ataques a la familia según el plan de Dios, ataques a la vida desde el vientre; todos esos males y más que resultan. Ese anochecer, ir hacia la oscuridad: hoy reconozcamos a Jesucristo entre nosotros e invitémoslo a entrar. Estemos seguros que, como aparece en el Evangelio de San Lucas, Él entrará.
Hermanos todos en el Señor Jesucristo, Redentor y Salvador nuestro, estamos ya en la Pascua, estamos en la vida de Cristo, es tiempo de actividades litúrgicas y de caridad, justicia y paz que nos muestran que Cristo está entre nosotros y que nosotros construimos su Reino. Aprovechemos las actividades diocesanas y parroquiales, como por ejemplo: primeras comuniones, confirmaciones,
Solemnidades, fiestas patronales, obras de caridad a nivel eclesial y personal, ordenación de presbíteros, para seguir nuestro gozo pascual y dar alegrías y esperanzas a nuestro corazón y al mundo que tratamos.
Jesucristo nos ha alcanzado y nos anima en el camino de la vida, no dejemos que nos domine el mal, no dejemos que impere la violencia, no dejemos que se maltrate la vida, no permitamos que la falta de fe y del sentido de la vida con todo lo que tiene: alegrías, sufrimientos, Esperanzas y esfuerzos, trabajo y descanso; sean invadidas por la ley mortal del mal.
¡¡¡FELICIDADES EN NUESTRA PASCUA!!!
Con mis oraciones y mi bendición: + Mons. Jorge. C. A.
