Por: Seminario Mayor Diocesano
La liturgia dentro de la comunidad formativa del seminario es una parte fundamental. Se celebra cada día el misterio de la fe, se vive la oración personal, la meditación de la Palabra de Dios, el alimento de la Eucaristía, la caridad, la celebración de la Liturgia de las Horas, la piedad, etcétera.
En este contexto celebrativo, el canto ayuda a introducir de una forma profunda al sentido propio de esta vida espiritual. El canto ayuda a que el alma se conecte mediante las palabras escritas por los escritores sagrados en conjunción con las bellas melodías y bellas interpretaciones. En la celebración de la Eucaristía, el canto anima y fortalece la fe, hace realmente presente a Cristo cuando canta los salmos.
Si alguno tiene la oportunidad de acercarse a la comunidad del seminario cuando celebra o en los espacios diocesanos, se puede dar cuenta de la existencia de un gran coro. Este es llamado: Schola Cantorum, del latín escuela de cantores. Esta conformado por seminaristas que tienen las aptitudes necesarias para realizar este ministerio.
De entre la comunidad, aquellos que manifiestan la facilidad por el canto, son capacitados para este servicio. De las diversas etapas se conforma, a fin de, dos veces por semana, reunirse para aprender la técnica vocal, el sentido propio del canto y la función del canto dentro de cada celebración. De entre los mismos integrantes, se selecciona a aquellos que manifiestan la capacidad de dirigir el canto, así como aquellos a los que se les facilita el correcto uso del instrumento propio de la Schola Cantorum, el órgano. Este ministerio reconocido dentro de la comunidad está acompañado de un sacerdote del equipo formador que funge como asesor, y de otro que funge como director.
Este ministerio realiza su servicio en el marco de las celebraciones comunitarias solemnes, la Adoración Nocturna de la sección del seminario, las celebraciones en las que se invita por parte de la Diócesis, así como durante las ordenaciones presbiterales y diaconales.
Esta actividad, además de ayudar a fomentar la espiritual, ayuda a la disciplina que genera de por si la música, y la actitud de servicio, de poner en practica los dones y talentos que Dios regala.
Pidamos a María, junto a Santa Cecilia y San Gregorio, patronos de este ministerio, interceda ante su Hijo, y mediante el Espíritu Santo, otorgue mas dones en medio de la comunidad y den frutos de alabanza al Padre
¡Que cantemos Señor tus alabanzas en el tiempo y la eternidad!
