Monseñor Jorge Alberto Cavazos Arizpe, en su Mensaje de Cuaresma 2018 nos invita a reflexionar en la importancia de vivir en la paz de nuestro Señor Jesucristo, en la paz que no es del mundo y que nos libera incluso de nosotros mismos, es por ello que, el Mensajero Diocesano te invita a hacer un recorrido en los puntos clave de este importante mensaje.

Cuaresma: Miércoles de Ceniza – Cena del Señor.

La Cuaresma comienza con el Miércoles de Ceniza, y sus cuarenta días posteriores también son significativos, tal como el camino del pueblo e Israel en el desierto que los lleva a la tierra prometida, los cuarenta días de ayuno del Señor Jesús para iniciar su ministerio público.

La Cuaresma concluye hasta antes de la misa de la Cena del Señor del Jueves Santo; durante este tiempo es propicia la participación voluntaria y bien dispuesta para habituarnos a lecturas bíblicas, asistir a ejercicios espirituales, de reflexión y misión, unirnos en la caridad fraterna con el hermano en necesidad.

La paz esté con ustedes (Jn 20,19)

La propuesta que ofrece Monseñor durante esta Cuaresma invita al feligrés a vivir al máximo las exhortaciones que nos hace Jesucristo resucitado, al invitarnos a vivir de una manera que solo su paz nos baste, en concentrarnos en caminar este recorrido de cuarenta días para disfrutar al final la recompensa que llega con la Pascua, es decir, cuando nos encontraremos con Jesús vivo y resucitado, cumpliendo sus promesas hasta el final, alegrando nuestra vida y disipando todo temor después de verlo crucificado, derramando su sangre salvífica en la cruz por todos nosotros.

Al invitarnos a vivir la paz de Jesucristo, Monseñor nos lleva de la mano para enlazar su mensaje al del papa Francisco en un mismo sendero, para recordar que al ofrecernos enteramente al hermano podemos dar testimonio del Hijo del Todopoderoso; y al atender las cosas del Padre, simplemente estamos buscado su dulce amor consolador, el amor que no tiene principio ni fin, el amor que nos lleva a decirle a Dios Padre: Aquí estamos para hacer tu voluntad, para regresar a Ti porque hemos pecado.

Es por ello que, monseñor Jorge Alberto, nos recuerda que la necesidad de encontrar esa paz (ya sea a nivel personal, familiar o social), es nuestra meta principal hoy en día, después de ser observadores de la violencia, las injusticias, las mentiras, y el negar la vida a los más inocentes, hemos terminado embriagándonos de esos mismos sentimientos de vacío, soledad y tristeza.

Ofrecimiento personal sin ataduras, sin restricciones

Llevar adelante la misión que nos corresponde vivir como cristianos ya sea en la vocación como en los carismas, es el llamado de nuestro Padre, para vivir este tiempo donde podemos fortalecernos y recibir con amor la presencia viva de su Unigénito, pero también para ser mejores criaturas, para cambiar aquellas acciones o actitudes que arrebatan la posibilidad de tener la paz que nos ha dejado por medio de Jesús, el nombre que siempre estará por sobre todo nombre.

Las recomendaciones a las que nos invita nuestro pastor diocesano para fortalecernos como cristianos en esta Cuaresma, son:

-Vivir las obras de misericordia:

  • Corporales
  1. Dar de comer al hambriento
  2. Dar de beber al sediento
  3. Dar posada al peregrino
  4. Vestir al desnudo
  5. Visitar al enfermo
  6. Socorrer a los presos
  7. Enterrar a los muertos
  • Espirituales
  1. Enseñar al que no sabe
  2. Dar buen consejo al que lo necesita
  3. Corregir al que está en el error
  4. Perdonar las injurias
  5. Consolar al triste
  6. Sufrir con paciencia los defectos de los demás
  7. Orar por vivos y difuntos

Ayuno y abstinencia:

  • Abstinencia de carne y ayuno el Miércoles de Ceniza y Viernes Santo; de 18 a 59 años.
  • Abstinencia de carne: todos los viernes a partir de los 14 años: El Episcopado Mexicano ha dispuesto que se pueda suplir la abstinencia de carne, con excepción del Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo, por:
  1. Una especial obra de caridad
  2. Una especial obra de piedad
  3. Un significativo sacrificio voluntario
  4. La abstinencia de alimentos que para alguien signifiquen especial agrado, se por la materia o el modo de confesión.

Participar fielmente de la Santa Misa.

-Fortalecernos con los sacramentos.

-Ir al encuentro de los ejercicios espirituales, así como atender las recomendaciones del papa Francisco (Jornada Mundial de la Oración por la Paz el 23 de febrero; y unirnos a la presencia Eucarística con Cristo el próximo 9 y 10 de marzo).

Para conocer el mensaje completo, consulte www.diocesisdesanjuan.org o www.mensajerodiocesano.com