Como cada año, en el marco de las fiestas patronales a San Nicolás de Tolentino, el primer domingo de septiembre, en esta ocasión, el pasado 2 de septiembre, la comunidad parroquial de San Nicolás de Tolentino, en Mexticacán, desborda de alegría, gozo, esperanza y fe, ya que entre cantos, porras, bellos tapetes de diversidad de formas y colores, hace su arribo a la cabecera municipal el Sagrado Corazón de Jesús (dicha imagen se venera en la comunidad del Santuario, en el Santuario dedicado a Él y perteneciente a este municipio), es por ello el motivo de esta gran alegría, en la tradicional “entrada del Sagrado Corazón”.

Concluida la Misa de 8:00 horas, en el Santuario, salió la romería, que, por más de cinco kilómetros, y de casi cuatro horas, hace su recorrido; a lo largo de dicho caminar, centenares de personas, que acompañan en su andar al Sagrado Corazón, todos los fieles vibran en inmensidad de sentimientos, de gratitud, de confianza de fe, de esperanza, queriendo verle por un instante, cargarle en sus hombros o tan solo capturar una imagen al momento de su paso, todo es una experiencia de fe, y de amor, aquí no importan las edades; niños, adolescentes jóvenes, adultos, ancianos, todos atraídos al Corazón de Jesús, el cansancio se siente, pero el corazón se anima, el calor abruma pero la alegría levanta, por un momento las tristeza y dolor desaparece, para dar paso a la fe y a la esperanza.

Para agregar una alegría y un signo de testimonio de fe de esta gente que ama al Sagrado Corazón, se unió como peregrino a esta romería, el señor Obispo Jorge Alberto (recorrió los más de cinco kilómetros), quien presidio la Eucaristía, a la llegada de la romería, y concelebraron los sacerdotes originarios, los sacerdotes destinados a esta parroquia, y algunos sacerdotes visitantes, con la participación de miles de fieles, que entregados con espíritu de fe, y devoción profunda participaron de magna celebración. En su homilía, el señor Obispo, nos recordó la grandeza del amor de Dios, que se nos simboliza en la exposición del Corazón de Cristo, que saliendo de mismo pecho, nos inflama de amor, y nos invita a saber vivir este amor en nuestros hermanos.

Con espíritu de fe, seguimos celebrando nuestras fiestas patronales a San Nicolás de Tolentino, que sea él quien lleve experimentar el amor del Corazón de Cristo Jesús.

“Viva el Sagrado Corazón de Jesús”

“Viva San Nicolás de Tolentino”

“Viva Santa María de Guadalupe”