En el actual contexto del desarrollo de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs), que parecen estar desplazando los Medios de Comunicación Social tradicionales (MCS), hay un tema que emerge como una necesidad: la alfabetización mediática.

Si bien es cierto que las TICs trajeron consigo diversas plataformas que hicieron más democrático el acceso y la producción de la información, la promoción de los derechos universales, la libre expresión, el intercambio y la valoración de las diversas culturas, etcétera; también es cierto que han agudizado ciertas problemáticas.

Según datos del análisis de la realidad que se obtuvieron de una muestra de más de 70 parroquias de nuestra diócesis, aplicadas en el segundo semestre de 2018, estas tecnologías han cambiado el modo como las personas se relacionan, aprenden y trabajan, haciendo cada vez más reales los efectos de la cultura virtual.

El uso y abuso de las TICs ha suplantado la función educativa de la catequesis, la escuela y la familia, proponiendo estilos de vida incompatibles con la vida cristiana y los valores cívicos; dando como resultado una conciencia mal formada que favorece la desestructuración del tejido social.

Las TICs, también han acentuado la dificultad, de algunas personas, para entablar sanas relaciones interpersonales y que, a su vez, proyectan en el mundo virtual, como el ciberbullyng, phishing, ciber acoso, sexting, etcétera.

Todo esto pone de manifiesto la necesidad de una educación para el recto uso y aprovechamiento de estos maravillosos instrumentos en la búsqueda del bien común, o como lo dicen los académicos: alfabetización mediática.

La alfabetización mediática no se restringe a la adquisición de habilidades técnicas para la utilización de las TICs, como tampoco el término alfabetización se refiere solo a la adquisición de habilidades de la persona para leer y escribir, sino al proceso que desarrolla las capacidades del individuo para interactuar en la interpretación y producción de textos.

La UNESCO propone como definición de la alfabetización mediática: La capacidad de comprender el papel y las funciones de los medios de comunicación (esto incluye las condiciones en que llevan a cabo dichas funciones); analizar críticamente y evaluar sus contenidos; hacer uso de estos para la participación democrática, el diálogo intercultural y el aprendizaje; y producir contenidos como usuarios.

Si resaltamos cuatro aspectos de la anterior definición: acceso, análisis, evaluación y creación de contenidos, y los utilizamos como parámetro para medir la alfabetización mediática en nuestra diócesis el reto aparece desafiante:

Según los datos de la Encuesta Intercensal de 2015 del INEGI, en Jalisco, la disponibilidad de la telefonía celular en los hogares, llegó al 85.5%; en tanto que la disponibilidad de equipo de computo representó el 38.9% y el acceso a Internet alcanzó el 39.2%. Es decir, solo cuatro de cada diez tienen acceso a una computadora con una conexión a Internet.

Es necesario considerar, como bien lo hace el Departamento de Estudios de la Comunicación Social Universidad de Guadalajara, que estos datos no son generalizados para todos los municipios del estado de Jalisco, también aquí existe una desigualdad digital en cuanto a la conectividad o el acceso.

Gracias a Dios nuestra diócesis es una zona privilegiada en la que las cifras pueden mejorar, sin embargo, la desigualdad digital también está presente, ya que existen comunidades parroquiales de nuestra diócesis donde no están disponibles servicios de telefonía celular o de Internet.

En el aspecto del análisis y la evaluación de los contenidos, los desafíos crecen. Un indicador de lo anterior es la proliferación de las Fakenews, o noticias falsas, que ponen de manifiesto el poco análisis de la información y la nula evaluación de las consecuencias que pueden ocasionar.

Se han dado casos lamentables de estafas electrónicas, incluso intentos de cibersecuestro, todo esto por falta de análisis de los contenidos y la poca evaluación de los daños que pueden recibirse.

Por lo anterior, celebramos que en los trabajos rumbo al VI Plan Diocesano de Pastoral, la Diócesis de San Juan de los Lagos ha asumido como un escenario del encuentro con Cristo, el ámbito de las TICs, afrontando el reto de impulsar el proceso de alfabetización mediática, en el que la actualidad del significado del mensaje del Evangelio, se construya a través de la interacción de los habitantes de la diócesis, los contenidos, los contextos y las plataformas tecnológicas; todo esto con el fin de generar participación crítica y creativa en la instauración de los valores del Reino en la vida personal y comunitaria.

Ojalá este proyecto se lleve a cabo y redunde en beneficio de todos los que formamos parte de esta porción del Pueblo Santo de Dios.